Nuestros orígenes se remontan cerca del año de 1987, cuando su fundador, Don Pedro Gamboa, con la participación de Joaquín Guerrero inician armando un pequeño aserradero localizado en su lugar de origen, un pueblo llamado “Potrero de Chaidez” del municipio de Tepehuanes, en Durango. A ellos, se les une enseguida Héctor Gamboa, un Ingeniero Industrial quien se suma a la formación de la empresa que llamaron “Industrial Forestal El Yaqui”.

A pesar de haber sufrido una desgracia, donde un incendio consumió su maquinaria al año de haber arrancado, fue un momento crucial para el posterior engrandecimiento en la empresa. A los pocos años se convirtió en un aserradero que mejoró y se modernizó trasladándose a la Ciudad de Santiago Papasquiaro, donde tuvo un importante crecimiento y que dio paso a una nueva empresa denominada “Macoar El Yaqui”.

Ésta última empresa, se originó por la necesidad que tenía la industria forestal para la extracción de la materia prima, pues era necesario utilizar maquinaria pesada y equipo especializado para abrir brechas entre las zonas boscosas. Con la obtención de tractores de orugas y moto conformadoras se iba formando un equipo humano, que años más delante, iniciarían sus primeros contratos en el área de la construcción con los ejidos y gobiernos locales.

Hoy en día, la diversificación de la empresa con la creación de una concretera que provee la demanda local, la producción de materiales pétreos de calidad y la diversificación en los productos de la construcción como obras de caminos, hidráulicas y vivienda, junto a la oferta de productos en madera aserrada en medidas especiales y tarimas,  han posicionado a la empresa como una de las líderes en la región.